Esa sensación de angustia que no abandona el pecho... El sueño que no se concilia, la promesa rota de no poder hacer silencio... Que hacer frente al abismo, palabras y palabras que hacen caso omiso al corazón por que esta vez es en serio, el all in se perdió en el river. De ilusiones y desilusiones se hace la vida, y la sensación de angustia no me abandona, porque de haber sabido este final, algo hubiese cambiado, me hubiese despedido, como esto lo merece, Nadie enseña a empezar, nunca se aprende a terminar y yo que no iba a sufrir por amor, otra vez estoy acá con esa angustia que camina desde el estomago hasta el pecho. Un día dos, un mes o dos, correr a otro nido no parece solución por que volverse a enamorar, no me ilusiona mas, por que el poeta que habla del amor, quizás no te conoció como te conocí yo...
Verte comenzar a amar, vivir un cuento de Hadas, y regalar parte de tu ser, en el balance entender que sí existió algo en serio y que ese sentimiento no se agota, por lo que estoy viviendo. Soñare contigo, hasta que el amor se extinga por que de caídas vive el hombre y el que cae 4 se levantara 5, pero quizás en el fondo del corazón espero con amor, que lo que se sembró sea mas fuerte que el nubarrón que se vivió hoy...
Una tristeza sobreabunda este corazón de cara a un hoy, que no te tiene junto a mi, sera que esa aventura hoy llega a su fin, pues que Dios te regale amor, como el que intente darte yo, por que solo quiero que esa sonrisa que me ilumino, sea parte de vos, en todo tu camino, eso bastara para avivar... Esa llama encendida, que le regalaste a mi vida.
